Lesbos. Mejores días para Moira

tira-lesbos

 

MEJORES DÍAS PARA MOIRA

Introducción

 

A principios de septiembre de 2015, una imagen cambió la percepción que el mundo tenía del drama de los refugiados de la guerra civil de Siria. La fotógrafa turca Nilüfer Demir se encontró de pronto con el cuerpo de un niño que flotaba, muerto, en la playa de la turística Bodrum. Mientras la policía retiraba el cadáver, la fotógrafa efectuó varias capturas que mostraban fríamente al portador de una muerte impropia, injusta e insoportable.

Estamos acostumbrados a la banalización constante con que la industria de la ficción trata la muerte y el dolor extremo. Pero se trata de una violencia consensuada, pactada, convencional, mientras que el cuerpo de un niño muerto tendido en el suelo se encuentra fuera de estas convenciones. Es, por decirlo de alguna manera, una violencia violenta, que actuando como frontera simbólica de lo que sería comprensible hizo que mucha gente se preguntara, ¿cómo se ha podido llegar a este punto?

Una de las muchas personas en las que esta imagen despertó un proceso inevitable de empatía fue la canciller Angela Merkel, que pocos días después proclamó que Alemania estaba dispuesta a acoger tantos refugiados como quisieran ir. Aquella decisión provocó involuntariamente el efecto llamada y en los meses que siguieron, ochocientas mil personas apiladas por las mafias en pateras sobrecargadas, atravesaron los escasos kilómetros que separan la costa turca de las islas griegas más cercanas. Muchos lo hicieron por el canal que separa Ayvacik de Lesbos. Cuatro mil murieron ahogados. El pequeño Aylan Kurdi, fue uno entre los muchos que dejaron la vida en el mar, pero la soledad extrema del niño, tendido en la arena, ya había cogido vida propia.

© JC Roca Sans

Descargar relato completo (catalán): Better days for Moira

Better days for Lesbos

 

Better days for Lesbos – versión corta

JC ROCA SANS

Exposición Ulled Asociados

Febrero 2017